“La mala situación del país, el no acompañamiento de los precios del mercado (a excepción de este año), más las condiciones climáticas desfavorables de los últimos años, han ocasionado una caída en picada de las cooperativas algodoneras y la nuestra no es la excepción”, declaró.

“Lamentablemente esto no mejora y no hemos encontrado acompañamiento del gobierno para tratar de salvar esta fuente laboral, somos una de las pocas cooperativas que han marchado este año a pesar de las complicaciones que tenemos por deudas contraídas los años anteriores, pero trabajamos pensando en las familias que dependen de este trabajo”, agregó.

“Estamos a casi dos años de no poder conseguir siquiera una audiencia con el gobernador y de recibir continuamente negativas de todos los sectores gubernamentales con los que nos comunicamos por teléfono, ya que no nos quieren atender, porque sin una propuesta en firme del Jefe de Estado, ellos no pueden solucionar nada”, sostuvo.

Indicó que “es lamentable que se le dé tan poca importancia a una fuente de trabajo de la que dependen tantos trabajadores, no se les pide nada regalado, simplemente pedimos algún sistema de financiación a través de la Provincia, porque no estamos en condiciones de sacar crédito en los bancos, incluso les hemos ofrecido la hipoteca de la cooperativa y maquinarias que tenemos en garantía, pero ni siquiera así hemos tenido respuestas”.

Sin respuestas

“No tuvimos respuestas de la Provincia ni de la Nación, ya que hemos presentado en dos ocasiones los papeles para el Repro y tampoco ha salido nada para nosotros, ayuda que nos serviría para paliar en algo la situación con el personal”, reprochó.

En cuanto al siniestro sufrido en la planta de biodiesel, señaló que “en febrero hizo un año del incendio de la planta de biodiesel y todavía no pudimos marchar, porque todavía no nos repone las cosas con el seguro que tenía la Fiduciaria por la prenda, así que esa actividad extra que teníamos, no la podemos reactivar”.

“No es de menos el gran incremento en los costos que hemos tenido este año, como aumentos de luz, gas, sueldos, presión sindical, todo nos juega en contra al momento de marchar, sumado a eso la fuerte presión impositiva que nos genera más deudas de las que resulta difícil salir”, evaluó.

Finalmente el presidente de la cooperativa concluyó “de seguir las cosas así, se nos podría avecinar el próximo cierre de nuestras puertas, sin oxígeno es imposible respirar, ya hemos golpeado tantas puertas, que no nos quedan muchos recursos, ojalá que se dejen de manifestar oídos sordos para que entre todos encontremos soluciones a los problemas que estamos atravesando, pero cuando ni siquiera te quieren recibir, se hace posible”.