Silvina Rinaldis expresó: “Fueron jornadas intensas, declararon aproximadamente 26 testigos. Hay que destacar la manera en que se desarrolló el juicio con mucho orden. con respecto a la pena el Código Penal tiene estipulada pautas para mesurar las penas como el artículo 4041 que nosotros tenemos que tener en cuenta a la hora de acusar  para poder fundamentar a la hora de pedir una pena y dentro de esto está la extensión del daño causal que  era mucho, teniendo en cuenta que Maira era mamá y que hay una nena de tres años que quedo huérfana, que Maira era una persona muy joven, el profundo dolor que le causo a la familia y sobre todo el ocultamiento del cuerpo que revela una mayor peligrosidad en el homicidio. Esto fue lo que tuve en cuenta al momento de mesurar la pena y pedir para Rodrigo Silva 21 años de prisión”.

INDICIOS INSUFICIDENTES

La fiscal de cámara agregó: “Para las otras personas como ser el padre de Silva  que estaba acusado de ser participe secundario del hecho, como Cáceres y Belén Ledezma que estaban acusados de encubrimiento. En realidad había pocos indicios que si bien fueron suficientes en la etapa de la investigación para la causa no. durante la investigación se requiere un grado de probabilidad de que alguien cometió un hecho y con esto se requiere la elevación de la causa a juico. Si en esta etapa del juicio oral lo que se necesita para tener una sentencia condenatoria es  certezas de lo que ocurrió. Estos indicios no eran suficientes porque eran hechos aislados. Belén Ledesma le había mandado mensajes a Rodrigo Silva diciéndole: “acá cruzo la policía, estoy muy nerviosa” y cosas así, que si bien pueden llevar a pensar que  algo sabe y que quería ayudar a Silva y de ahí pensar que sabía que Silva la mato a Maira y que quería ayudar a este a eludir a la justicia, sería como un exceso de imaginación. No son elementos que te den certezas para decir que hubo un encubrimiento. Lo mismo cabe en el caso de los demás imputados”