El proyecto recibió el acompañamiento unánime de los presentes, y –de sancionarse- tendrá la finalidad de elaborar ejes en la enseñanza y la práctica de las normas de conducta y convivencia, fundamentos éticos y científicos, que formen en la comunidad conciencia desde la temprana edad sobre la responsabilidad en la protección de los animales.   La propuesta legislativa tiene como objetivo educar bajo el paradigma de Una Salud, Tríada: Ambiental, Animal y Humana; fomentar los derechos de los animales, generar conciencia, promover el bienestar, valores y respeto de la fauna chaqueña; promover el cuidado, respeto y tenencia responsable de los animales domesticados; concientizar sobre la preservación.   Pero también perseguirá la enseñanza del cuidado y protección de los animales salvajes y en peligro extinción; realizar campañas, talleres y capacitaciones de promoción, protección y concientización de derechos de los animales y la no violencia; desarrollar acciones educativas y de intervención directa en la comunidad con el fin de promover la prevención de las enfermedades zoonoticas; motivar a niños, niñas y adolescentes a transmitir los conocimientos adquiridos a las personas adultas y fomentar una educación de convivencia humano-animal-ambiente en las áreas de Educación y Salud.   La comisión se constituyó con quórum de los diputados Gladis Cristaldo, Juan Carlos Ayala, Teresa Cubells, Alicia Digiuni, Débora Cardozo y Livio Gutiérrez.   Como parte del temario del día, la comisión se abocó también al tratamiento de un proyecto de las diputadas Cuesta, Vargas y Charole, el que tiene por objetivo garantizar el cupo femenino en los eventos de música en vivo, que cuenten como mínimo con la presentación de tres artistas o grupos musicales en una o más jornadas, ciclos o programación anual.   La iniciativa tuvo acompañamiento de los diputados Gladis Cristaldo, Juan Carlos Ayala, Teresa Cubells, Alicia Digiuni y una propuesta de mantenimiento en cartera de la legisladora Débora Cardozo.   En los fundamentos, se pone enfasis en el "histórico reclamo por parte de las mujeres músicas, tanto intérpretes como autoras y compositoras, sobre las dificultades para encontrar espacios donde exponer su visión del mundo a través del arte. Si para los músicos en general cada vez se achican más y más los espacios para tocar, en el caso de las mujeres esta estrechez alcanza la imposibilidad de dedicarse a la música como medio de expresión y como fuente de trabajo e ingresos económicos".