De esta forma, los recursos estatales del Chaco pasan por una caja negra que está por fuera de todo control. El único organismo que controla la Fiduciaria es el Tribunal de Cuentas, que tiene competencia porque ser la Fiduciaria una Sociedad anónima donde el Gobierno del Chaco es accionista mayoritario.

Ahora, para evitar incluso el control del Tribunal de Cuentas, las autoridades de la Fiduciaria del Norte presentó un pedido de medida cautelar, por la cual solicita que el Tribunal de Cuentas suspenda todo control sobre los fondos que maneja la Fiduciaria. La medida fue presentada frente al Juzgado Civil y Comercial n° 21 y el Juzgado hizo lugar, ordenando suspender los efectos de las resoluciones y procedimientos ordenados por el Tribunal de Cuentas sobre la Fiduciaria del Norte. Esto es, el Juzgado  dictaminó en favor de que los fondos estatales que la Fiduciaria maneja no tengan ningún control del mismo estado.

Por eso, el Tribunal de Cuentas dispuso, de acuerdo al acuerdo plenario 23 de este año, “recomendar al Poder Ejecutivo, atento al flujo del erario provincial que destina a los fondos fiduciarios, la suspensión en la ejecución de los contratos celebrados en carácter de Fiduciante con la Fiduciaria del Norte S.A.” (resolución del 6/9). En dicha resolución, el Tribunal de Cuentas amplía la recomendación a todos los entes autárquicos y descentralizados, para evitar nuevos contratos con la fiduciaria y la continuidad de los vigentes.

El Tribunal de Cuentas es un organismo de control previsto de la constitución y tiene autonomía. La dirección de la Fiduciaria responde directamente al Gobernador, dado que el Estado, como accionista mayoritario y prácticamente excluyente, decide quienes son sus autoridades. Por lo tanto, el pedido de medida cautelar al Juez Civil y Comercial n° viene directamente de Peppo. Como es de preveer, aunque el Tribunal de Cuentas el 6 de septiembre recomienda dejar de enviar fondos a la Fiduciaria, el Estado Provincial ha continuado con los contratos, porque le sirve tener una caja negra fuera de todo control.

La Fiduciaria del Norte fue el terreno de operaciones del ex mano derecha de Peppo, Horacio Rey, para sus contratos fraudulentos con pauta publicitaria que fueron destapados por la causa judicial “Lavado I”, por la cual está preso Rey, Butticé y otros ex funcionarios.

El Partido Obrero, en la Cámara de Diputados, ha planteado en diversas ocasiones la necesidad de disolver la Fiduciaria e integrar su presupuesto al presupuesto corriente del Estado. El reclamo del Tribunal de Cuentas refuerza esta posición. Planteamos una auditoría completa bajo control de representantes populares, la disolución de la Fiduciaria y las sanciones correspondientes a los responsables del manejo fuera de control de los fondos públicos.

FUENTE PRENSA OBRERA